El método Kumon es un sistema científico japonés, el cual se basa en dos programas: uno para matemáticas y otro para lectura. Su principal objetivo es desarrollar el potencial educativo de los niños. La clave para lograr este objetivo es motivar a los estudiantes a mejorar su rendimiento y darles confianza.
El método Kumon es un sistema educativo desarrollado por un profesor de matemáticas japonés cuyo hijo tenía dificultades para aprender la asignatura. Más tarde, el mismo maestro comenzó a desarrollar programas de lectura cuando se dio cuenta de que existía un vínculo entre la enseñanza del idioma y la enseñanza de las destrezas de lectura.
El sistema consiste en estos tres programas de matemáticas, inglés y lectura, que tienen como objetivo desarrollar el potencial educativo de cada alumno. Se dividen en niveles. Por ejemplo, las matemáticas tienen en cuenta el contenido desde la primera infancia hasta la escuela secundaria, desde el recuento y el dibujo de líneas hasta los cálculos diferenciales e integrales o incluso las estadísticas.
El objetivo es dar a los estudiantes las habilidades y hábitos para maximizar sus resultados de aprendizaje, explica Aurelio Sánchez, jefe de servicios generales en Kumon, España. Está diseñado para que los estudiantes lo practiquen como una actividad extracurricular dos veces por semana durante media hora al día y el resto del día (sólo unos minutos al día) como una actividad extracurricular.
La participación de los padres: una cuestión importante en el método Kumon
El trabajo de los padres es una de las áreas a las que el programa presta más atención.
El éxito del método se basa en gran medida en un triángulo en el que los estudiantes, los profesores y los padres están en la cima.
Los padres se enfrentan a dos retos principales:
Una es calificar los ejercicios que los niños hacen todos los días en casa y que les toman poco tiempo porque los maestros de Kumon les proporcionan libros correctivos para que no tengan que pasar más de unos pocos minutos al día.
El segundo desafío es motivar a los niños para que aprecien sus esfuerzos diarios.
¿Niños autodidactas?
La autodidáctica es otro objetivo basado en el principio de que es mejor enseñar a pescar que dar pescado.
Cuando traducimos esta idea al método de Kumon, llegamos a la conclusión de que es más importante darle al estudiante herramientas para el auto estudio que enseñarle algo.
El propósito de esta filosofía es dar a los estudiantes habilidades que duran toda la vida.
Además, el niño aprende contenidos que van más allá de la escuela, es decir, contenidos que nadie ha explicado antes.
Por lo tanto puede resolver con éxito nuevas tareas. Tareas que sin duda son una experiencia muy agradable para él. Las mismas no sólo le aportan conocimientos, sino que también contribuyen a construir la confianza que tendrán en sí mismos.
Existen 201 centros en toda España. Algunos están ubicados en las propias escuelas, impartiendo el método Kumon como actividad extracurricular. Mientras que otros son propios de este método y lo aplican en su totalidad.