Seguro has notado que tu bebé tiene pequeños granitos en mejillas, el mentón o la nariz, y te has preocupado, pero a no desesperar porque te contamos que se trata de acné miliar.

Todos los bebés no presentan el mismo cuadro. Están aquellos que solo tienen algunos granitos y los que  gran parte de la cara está cubierta por acné.

Muchos padres se preocupan, porque les resulta molesto ver la blanca piel de su bebé invadida por este tipo de acné y se preguntan si son peligrosos para la salud del niño.

Acné miliar

El acné miliar es inofensivo para el bebé.

¿Qué es el acné millar?

Son los granitos de color blanquecino o amarillentos que aparecen en distintas partes de la cara del bebé y son muy comunes e inofensivos.

Tienen su origen en la placenta, ya que a través de ella se transfieren hormonas del cuerpo de la mamá hasta el organismo del bebé.

Este proceso ocurre poco antes de nacer y, una vez que el bebé nació, las hormonas estimulan la producción de las glándulas sebáceas de la piel, que da lugar a la aparición de los granitos.

También es común que los padres encuentren protuberancias similares en sus encías o paladar. Tampoco hay que alarmarse ya que se trata de las perlas de Epstein que también inofensivas

¿Pueden eliminarse esos granitos en la cara?

En realidad, el acné miliar desaparece por sí solo cuando el organismo del bebé empieza a regular la producción de grasa en su pequeño cuerpo.

Acné miliar

El acné miliar desaparece por sí solo

Los médicos recomiendan no colocar ninguna crema u otro producto similar es esa zona y menos apretarlos para eliminarlos, ya que esto puede causar algún tipo de infección en la piel.

¿Qué puede hacerse ante el acné miliar?

Lo mejor es no colocar nada que pueda irritar la piel del niño y puedes ayudarlo si:

  • Mantienes la piel del bebé limpia y fresca
  • Lavas el rostro con agua y jabón especial para bebés (no más de dos veces diarias)
  • No frotas la zona y tocarla lo menos posible

Lo más importante es que los padres tengan paciencia ya que el bebé volverá a tener la piel rozagante una vez que desaparezcan esos granitos, y no colocar ningún producto que puede causar males mayores en la piel del bebé.

Es válido aclarar que, si los padres tuvieron acné durante la adolescencia o en la edad adulta, es probable que el niño también lo tenga al llegar a esa edad.