Durante el embarazo el cuerpo de la mujer sufre cambios físicos muy evidentes en todo el organismo. La mayoría de ellos son muy fáciles de evidenciar pero otros son casi imperceptibles. En algunas ocasiones se presentan alteraciones en algunos de los sentidos, entre ellos están los problemas oculares durante el embarazo.

problemas oculares durante el embarazo

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Cambios fisiológicos durante el embarazo

  • Cambios de refracción y acomodación. Debido a que existe retención de líquidos en la córnea y el cristalino. Aumentando así su grosor y se resuelven alrededor de las 6 semanas después del parto.
  • Disminución de la presión intraocular. Ya sea en pacientes normotensas o hipertensas. El descenso dura todo el embarazo principalmente en la segunda mitad y continúa 2 meses después del parto
  • Cambios corneales. Son variados y suelen tener consecuencias diversas, como la disminución de la sensibilidad corneal a partir del 4º mes
  • Alteraciones de la película lagrimal. Junto con los cambios mencionados en la córnea, puede empeorar la tolerancia a las lentes de contacto.

Causas más frecuentes de problemas oculares durante el embarazo

  • Dolores de cabeza. Las migrañas son causadas por cambios hormonales y son comunes entre algunas embarazadas. En algunos casos, las migrañas pueden hacer que los ojos se sientan más sensibles a la luz.
  • Disminución de la agudeza visual. Puede ser temporal debido a las migrañas o continua.oculares durante el embarazo
  • Fotofobia. Esta condición suele aparecer como consecuencia de las migrañas que se generan por los cambios a los que se somete el cuerpo.
  • Cambios refractivos. Pueden acentuarse los problemas preexistentes como consecuencia del cambio en los niveles hormonales y en algunos casos la mujer embarazada debe cambiar la graduación que necesita para sus lentes de contacto o lentes ópticos
  • Disminución de la secreción lagrimal y sensación de resequedad. El problema generalmente es temporal y desaparece después del parto.

oculares durante el embarazo

  • Visión de manchas en el campo visual. Puede ser un indicador de un cuadro de hipertensión ocular. Por eso es importante que todas las mujeres que tengan diabetes se sometan a un completo examen de pupila dilatada.
  • La hipertensión por sí sola no es un síntoma de problema ocular. Aunque las embarazadas que sufren presión arterial alta tienen riesgo de desarrollar una retinopatía o desprendimiento de retina. Un serio problema que puede conllevar problemas irreversibles.

Es importante consultar al medico para corroborar que no existe una patología asociada a este tipo de alteraciones.