Pedir ayuda ¿Por qué nos cuesta tanto?, para muchas personas la ayuda resulta toda una odisea. Ya que mantienen diversas creencias erróneas sobre lo que significa ayuda. Es necesario aclarar que pedir ayuda no es malo, solo un acto de valentía.
Conoce todo lo relacionado acerca de esta temática y cómo influye está en el desarrollo del pequeño. Aprende esto y más en esta nueva sección de QuePadres.
Pedir ayuda no es malo, ¿porque es tan difícil?
En el actual mundo competitivo en el que vivimos, es común pensar que si pedimos ayuda nos condenamos a tener que devolver el favor. Debido a que tenemos la creencia de que todo lo que hacemos es con la esperanza de recibir algo a cambio.
Es necesario que sepas que lo que esperamos de las demás personas es un reflejo de nosotros. Esto significa que cambiar nuestras creencias con respecto a las demás, primero que debemos hacer es centrarnos en nuestro concepto.
¿Qué debemos tener en cuenta?
- Reconocer nuestras limitaciones. Esto quiere decir que en ocasiones no poseemos todas las respuestas, ya que no tenemos la verdad absoluta. Debido a que no somos capaces de autogestionarnos sin ayuda de la naturaleza.
- Pedir ayuda cuando se necesita es un acto de humildad y valentía. Esto hace reconocer el hecho de que poseemos herramientas que nos hacen aumentar nuestras posibilidades y acciones, en nuestros objetivos y en nuestras dificultades.
- Pedir ayuda significa que damos un voto de confianza a la otra persona. Esto rompe así con los prejuicios que tenemos. Además fortalecemos los vínculos y nos quitamos el orgullo y la arrogancia que nos victimizan. Ya que esta nos hace creer que no podemos confiar en nadie o estamos solos.
- Pedir ayuda nos hace más honestos. Esto cuando seamos nosotros los que tenemos que ayudar a alguien.
- Tienen que ver reconocimiento de las propias limitaciones. La dice mucho de nuestra humildad y la valentía. Debido a que nos prepara para afrontar y resolver nuestros prejuicios.
- Atrévete a pedir ayuda. Toda madre necesita ayuda, y siempre debe pensar en el bienestar de tu pequeño. No permitas que este sufra los males de la arrogancia.
Una educación basada en el interés y falta de cariño puede desembocar en la falta de confianza hacia las personas en general. Creyendo que si se pide ayuda, se está en deuda con la otra persona, y hay que hacer una devolución del favor. Además puedes buscar ayuda mediante salus, los cuales te enseñaran acerca de las necesidades de los recién nacidos.