Las lágrimas limpian y mantienen húmeda la superficie del ojo, pero si el conducto lagrimal está obstruido las lágrimas se acumulan en el ojo y debemos realizar un tratamiento. Te explicamos como funiona y cómo despejar el conducto lagrimal obstruido.
Causas y síntomas
Aproximadamente 1 de cada 25 bebés nace con los conductos lagrimales obstruidos. Esto generalmente ocurre porque el extremo inferior del conducto lagrimal no se abre antes de que nazca el bebé. Las principales causas son:
- Tener las pestañas húmedas o puede haber un exceso de lágrimas. Las lágrimas no logran drenarse por el conducto lagrimal, así que mojan las pestañas y a menudo las mejillas.
- Tener los párpados pegados, especialmente por la mañana. La causa de esto es un líquido claro y pegajoso llamado mucina (moco), que normalmente aparece disuelto en las lágrimas. Cuando las lágrimas no fluyen correctamente, la mucina permanece pegada al exterior del ojo. Si aparece un líquido amarillento o verdoso, no es mucina sino pus producido a causa de una infección.
- Es posible que su niño a menudo tenga un ojo enrojecido a causa de la infección. Las infecciones son más comunes porque las lágrimas no drenan correctamente.
Un exceso de lágrimas no siempre significa que un conducto lagrimal esté obstruido. Si su bebé lagrimea excesivamente, un oftalmólogo debería examinarle el ojo.
Cómo despejar el conducto lagrimal obstruido
Existen 2 opciones:
- Hacer un procedimiento de sondaje para abrir el conducto lagrimal obstruido de su bebé si su bebé tiene de 6 meses a 1 año de edad.
- Esperar hasta que su bebé cumpla 1 año de edad para ver si la obstrucción del conducto lagrimal se abre por sí misma. Si no se abre, entonces puede decidir realizarle el procedimiento.
A tener en cuenta
La mayoría de los conductos lagrimales obstruidos se abren solos para cuando el bebé llega al año de edad. Se puede recomendar el sondaje si:
- Su bebé tiene casi 12 meses de edad y el conducto lagrimal aún sigue obstruido.
- Su bebé tiene una zona azulada y abultada a un costado de la nariz.
- Su bebé se pone más molesto e irritable a causa de los conductos lagrimales obstruidos.
- Su recién nacido tiene signos de infección del conducto lagrimal.