La noticia del embarazo produce una experiencia de felicidad, pero también, de cambios. Cambios que pueden empezar a materializarse en el ámbito profesional, especialmente, dependiendo de las particularidades del puesto de empleo. ¿Sabes cómo puede afectar el embarazo a tu trabajo?
Si el desarrollo de ese puesto de empleo no produce ningún tipo de riesgo para la mujer embarazada, podrá seguir desarrollando esa actividad hasta muy avanzada la recta final de la gestación.
Índice
Prevención de riesgos laborales en el embarazo
Tu bienestar y el del bebé es lo más importante en este momento. Y para potenciar este bienestar no solo es importante atender a las circunstancias específicas de cada embarazo, sino también, a las tareas que tiene que realizar la embarazada durante su jornada laboral. Por ejemplo, conviene tener especial cuidado con aquellos empleos en los que las personas tienen que levantar pesos pesados de forma regular.
Embarazo a tu trabajo
Otra de las particularidades del puesto de empleo que puede afectar especialmente a la embarazada es pasar mucho tiempo en una misma postura. Por ejemplo, de pie o sentada. Puede ser conveniente hablar con el jefe para conciliar el desarrollo profesional en este periodo desde la seguridad y el bienestar.
Una de las razones por las que conviene informar a la empresa sobre la noticia del embarazo es para que el departamento de recursos humanos pueda analizar los posibles riesgos que se derivan de ese puesto de empleo y pueda plantear alternativas.
Si valoras la posibilidad de pedir la baja durante el embarazo por determinadas circunstancias, habla con tu médico.
8 consejos para trabajar durante el embarazo
1. Utiliza ropa y calzado de oficina que te resulten muy cómodos.
2. Refuerza tu descanso durante tu tiempo libre y cuida tu alimentación ya que estos son dos de los pilares esenciales.
3. Disfruta de breves paseos al salir del trabajo.
4. Si tienes sobrecarga de trabajo, valora la posibilidad de delegar algunas tareas en otros profesionales que trabajan en el equipo.
5. Establece un orden de prioridades en este momento de tu vida. No seas tan exigente contigo misma.
6. Pon el despertador diez minutos antes de lo habitual para comenzar el día con tranquilidad disfrutando de un desayuno saludable. Si empiezas el día con prisa, corres el riesgo de ir acumulando estrés.
7. Si no puedes volver a comer a casa por motivos de horario, elige un restaurante que ofrece un menú integrado por platos de comida casera. Selecciona platos que sean adecuados para ti.
8. Cuídate mucho a nivel físico y emocional. El sentido del humor y el optimismo son terapéuticos frente al estrés del embarazo a tu trabajo.