Con el paso del tiempo los factores de riesgo en el embarazo se han incrementado. Estos incrementos se deben a factores de contaminación sónica y de temperatura.

Los nacimientos prematuros han aumentado significativamente en los últimos años, en parte debido a una serie de factores relacionados con los estilos de vida actuales y también a ciertas condiciones ambientales que son perjudiciales para la salud.

Según un estudio realizado por investigadores del Instituto de Salud Carlos III, la congestión del tráfico y las olas de ruido y calor influyen en el aumento de los nacimientos prematuros.

Olas de calor como factor de riesgo en el embarazo

Analizaron casi 300.000 nacimientos en 2001 y 2009. De ellos, 24.000 fueron bebés prematuros de 37 semanas, los otros 20.000 nacieron muy pronto. Estamos hablando de 30-37 semanas y las 4.270 semanas restantes fueron extremadamente prematuras. Con un período de gestación de menos de 30 semanas.

La contaminación de los coches, uno de los factores de riesgo en el embarazo

Las partículas con un diámetro inferior a 2,5 micras, PM2,5, emitidas principalmente por los vehículos diesel, se asocian a los nacimientos antes de las 37 semanas de embarazo, ya que un día después de un pico de contaminación por PM2,5 aumenta el riesgo de parto prematuro en un 3,7% por cada 10 micras por metro cúbico de concentración aumentada de PM2,5. Sin duda alguna uno de los factores de riesgo mas relevantes.

Olas de calor o altas temperaturas

Las altas temperaturas durante las olas de calor, es uno de los factores de riesgo que no sólo afectan al número de nacimientos prematuros, sino que también se asocian a los nacimientos muy prematuros.

Un día después de una temperatura máxima diaria superior a 34°C aumenta el riesgo de nacimientos prematuros en un 5,2% y de nacimientos muy prematuros en un 4,7% por cada grado que la temperatura máxima diaria supere los 34°C.Ruido como factor de riesgo en el embarazo

Finalmente, el ruido, específicamente el 70%, se debe al tráfico vehicular en una gran ciudad. No sólo está asociado con los nacimientos prematuros y muy prematuros, sino que también existe una clara correlación estadística entre el ruido diurno y los nacimientos por debajo de las 30 semanas de embarazo.

Por cada dB(A) de aumento del ruido diurno en Madrid en el mismo día, el riesgo de parto prematuro aumenta un 15,4%, el de parto muy prematuro un 6,9% y el de parto extremadamente prematuro un 22,2%.

Ya sabíamos que hay menos nacimientos prematuros en las zonas verdes, donde hay menos contaminación ambiental y acústica, pero los datos del estudio son muy sorprendentes, sobre todo para las que vivimos en Madrid y dimos a luz en pleno verano.