Durante el segundo trimestre de vida, el bebé empieza una nueva etapa que potencia su desarrollo psicomotor. Desde los 3 a 6 meses, el niño realiza ciertas actividades que al principio de su vida era incapaz. Por ello, debemos estar atentos al desarrollo psicomotor de los niños de 3 a 6 meses.

 3 a 6 meses

Es prescindible tener mayor estimulación con el niño para ir fortaleciendo ciertos músculos que son necesarios. Como padres van a percibir que su bebé realizaras ciertos movimientos como tocar, coger objetos y manipularlos. Tendrán más contacto social, e incluso será capaz de identificar a sus padres.

Desarrollo psicomotor de los niños de 3 a 6 meses

Entre los 3 y 4 mes

El bebé empezará a ponerse a boca abajo por iniciativa. Podrá apoyarse con los codos, subiendo el tórax y la cabeza un tantito alto. Además se inicia actividad lúdica, lo cual empieza a jugar solo, con un adulto o algún juguete livianos. Hay que tener en cuenta que durante este periodo se llevara cualquier objeto a la boca.

Entre los 5 y 6 mes

Si colocamos el niño de pie podrá aguantar gran parte de su peso. Podrá escuchar y percibir sonidos y seguirlo moviendo su cabeza. Además se mantendrá sentado por largo tiempo manteniendo en buena posición la cabeza y el resto de miembro superior. Algo muy curioso que cada vez que se mire sobre un espejo sonreirá.

3 a 6 meses

El último mes de la segunda etapa de vida, el niño empezara darse vuelta e intentar levantarse con las muñecas. Al sentarse jugará con más frecuencia, se pasara el juguete de mano a mano y tendrá mayor flexibilidad.

Actividades para desarrollo psicomotor de los niños de 3 a 6 meses

  • Caricias y cosquillas. Es importante tener mayor estimulación en los primeros meses de vida, fomentando las sensaciones en este caso el tacto. En tales zonas sensibles como la cara, la palma de la manos, los pies y toda la columna vertebral.
  • Una estimulación muy buena es mantener un buen rato al bebe en los brazos. Ayuda a que estimule y obtenga fuerza para aguantar su cabeza.3 a 6 meses
  • Cuando se encuentre boca arriba, podría ayudarlo a flexionar, estirar sus extremidades. También ayudarlo, animarlo a que por iniciativa gire, de vueltas y se apoye en sus bracitos.
  • Poner en sus manos objetos con diferentes texturas, flexibles y algo liviano. Fomentaría en su capacidad de agarrar otro tipo de objetos y explorarlo.
  • Colocar sonidos o música suave para estimular el sentido auditivo, y vaya acostumbrado a diferentes ruidos.

Si el bebé esta boca arriba, podríamos agarrarlo de las manitos, mientras le hablamos para que él pueda sentarse. Y seguir fortaleciendo sus músculos, de la espalda, tórax, cuello, entre otros