Es importante saber reciclar la ropa de tus hijos porque los niños crecen rápido y esto ayudará a tu economía. Un pantalón que le has comprado hace poco, el bello conjunto que le regaló la abuela hace unos meses, ya no le entran porque pegó el estirón.

Nunca está demás el reciclado de la ropa porque los niños pueden volver a usar aquella que está nueva y ya no les entra, o no les gusta. Una ropa vieja reciclada puede quedar como nueva si sabes hacer algunas cosas básicas.

¿Qué puedes hacer para reciclar la ropa de tus hijos?

Te daremos a continuación algunos consejos que de seguro te gustarán y darán un aspecto fresco a aquellas ropas que tus hijos ya no usan.

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Ya no más pantalones cortos

Es muy común que cuando tus hijos crezcan sus pantalones ya les queden cortos. Por eso una solución es ponerle un añadido en la parte final con un trozo de otro pantalón. No importa que la parte añadida sea diferente, si está prolijo quedará como un bonito detalle.

Otra de las opciones es transformar ese pantalón largo en uno corto o en bermudas. Será más fácil y las podrán usar durante todo el verano.

Solución para las faldas pequeñas

Una buena idea es que se conviertan en estuches o bolsas para que tus hijos puedan llevar a la escuela o al club. Solo debes coser la parte inferior de la falda y ponerle dos tiras para colgar.

¡Si la estela está en buenas condiciones, quedará ideal! Solo tienes que animarte.

Calcetines sueltos como lapicero

En todas las casas hay calcetines que nunca han encontrado su par. Quizás este nuevo y te de pena tirarlo, entonces puedes reciclarlo. Podemos crear un estuche para llevar las pinturas de los niños. Quedará muy bonito y original.

¿Y las camisetas pequeñas?

Aquellas camisetas ya no les entran y que suelen ser las preferidas de nuestros hijos, no tienen que tirarse. Podrás convertirlas en bolsas de merienda o en bolsas para llevar la ropa interior de viaje. Solo hay que recortar la parte central y coser la parte de abajo.

Zapatillas de deporte y zapatos reciclados

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También pueden reciclarse. Tienes que limpiar con antigrasa toda la goma de alrededor, y sacar prolijamente todas las manchas. Y los cordones se pueden sustituir por una goma de color, haciendo un nudo en cada extremo, y es una buena forma para que no tengan que atarlos más. Tus hijos lo agradecerán.