Aunque en bebés parezca hermoso si esta gordo o rollizo, no siempre es sinónimo de saludable es importante conocer cuando esta gordo o es sano. Luchar contra la obesidad es un reto que debe realizarse desde el inicio de la vida. Por ello se recalca la importancia evaluar al bebé gordito.
Conoce más acerca del estado de salud de tu bebé y como esto puede influir en su vida en el futuro. Aprende esto y más en el siguiente apartado.
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Bebé gordito, importante tener en cuenta.
La obesidad y el sobrepeso no son exclusivos de adultos. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en 2016 alrededor de 41 millones de niños menores de cinco años tenían sobrepeso. Así mismo 340 millones entre 5 y 19 años tienen sobrepeso u obesidad.
La obesidad infantil se considera una enfermedad multifactorial, ya que puede estar condicionada por factores genéticos, pero no son determinantes. Son los estilos de vida de la familia los que impulsan el desarrollo de obesidad en los niños por eso es necesario el cuidado con los alimentos no recomendados.
Obesidad infantil complicaciones futuras
La obesidad en la infancia tiene graves consecuencias. Aquellos que presentan obesidad infantil están en riesgo de presentar niveles más elevados de presión arterial, de colesterol e insulina.
Del mismo modo los problemas respiratorios durante el sueño, anormalidades en el periodo menstrual en las niñas. Los problemas ortopédicos se hacen presentes debido al exceso de peso en las articulaciones, en comparación con niños de peso normal.
Bebé gordito, ¿cómo evitar la obesidad infantil?
- Ofrece a tu hijo alimentos sin azúcar desde el primer día. El niño no extrañará este tipo de sabor ya que no los conocerá.
- Los Chocolates, caramelos o galletitas fuera de hora son alimentos poco recomendables, debido a sus altos contenidos en azucares y grasas
- Si quiere mordisquear algo sólido, dale antes un poco de corteza de pan que una galleta o cualquier otro alimento elaborado con azúcar o miel.
- Vigila el menú semanal de la escuela infantil con el fin de complementar adecuadamente su alimentación por la noche.
- En caso de sed, lo más saludable es el agua para beber. Evita los zumos salvo los recién exprimidos en casa y los refrescos, ya que tienen un alto contenido en azúcares.
Es importante llevar a nuestros pequeños a una consulta pediátrica para evaluar el peso de los mismos. De esta manera existe seguridad del perfecto estado de salud de ellos y además que el pediatra dará las recomendaciones adecuadas.