El test del árbol refleja la esencia personal y es, sin duda, una de las herramientas de proyección más sencillas que pueden utilizar los niños, adolescentes y adultos. Normalmente no hay resistencia que pueda ocurrir en una prueba de este tipo u otras pruebas que representen figuras humanas.

Por su parte, dibujar un árbol parece inocente, inofensivo, poco intrusivo a primera vista, por lo que suele ser muy bien recibido, incluso por los niños que no dibujan bien.

Pero detrás de la simplicidad de un árbol en el papel hay varios elementos básicos que forman la estructura del propio ego.

El árbol se apodera de la personalidad del autor y nos permite ver la riqueza de su paisaje personal y sus matices. Este lienzo único refleja la verdadera esencia de la persona que lo pintó.

El test del árbol puede utilizarse a cualquier edad, aunque para los niños más pequeños es entre los 5 y 6 años. Lo que coincide con la consolidación de las habilidades básicas de dibujo, se hace más importante porque es entonces cuando el árbol con todos sus elementos emerge.

Necesitamos papel limpio, un lápiz, una goma de borrar y lápices de colores. Se le pide al niño que dibuje un árbol al azar y puede pintarlo si quiere. No tienes que darle ninguna idea de cómo debe ser el árbol. El niño tiene que pintarlo sin ninguna influencia exterior. Si insiste en que le digas que es lo que debe hacer, solo expresa que debe ser como mejor le parezca.

¿Cómo se analiza el test del árbol?

Test del árbol

Tienes que mirar los diferentes elementos:

Suelo

Un dibujo sin suelo o una línea de raíz puede indicar inestabilidad emocional y personal en el paciente.

Las raíces desproporcionadamente grandes y brillantes también pueden ser un indicador de problemas, reticencia emocional, ira y arraigo.

Tronco

Muy delgado: se asocia con personas muy sensibles y vulnerables o, por otro lado, puede indicar la presencia de tensión o demandas externas que cambian el descanso y el bienestar del paciente.

Tronco muy amplio: personas impulsivas con alta emocionalidad y poca capacidad de control.

Un tronco con proporciones normales indica equilibrio interno.

Tronco recto: la persona adecuada, con una buena capacidad de abstracción.

Línea troncal ondulada: persona sociable, dulce y sin problemas de comunicación.

Tronco con dilataciones, abrevaderos, puntas salientes: indica la presencia de miedo, lesiones que contienen emociones, inhibición…

Copa

Las copas de los árboles reflejan la interacción con el entorno físico y externo. Mientras que las raíces y el tronco están más relacionados con el mundo interior y emocional, las ramas ya deberían representar un nivel mental diferente.

Corona pequeña: Los niños menores de 9 años siempre tiran de coronas pequeñas, eso es normal. Pueden significar inmadurez, una conexión con el mundo del niño.

Una copa grande: puede decirnos que la persona que ha pintado tiene una gran imaginación, entusiasmo, e incluso un punto narcisista más brillante.

Árbol sin copa: puede decirnos que la persona que hizo el dibujo tiene una falta de desarrollo, un posible problema cognitivo.

Copa espiral: puede ser una persona comunicativa, con buen gusto, delicada.

Copa de Rayo o vara: Una persona terca e impulsiva con una cierta cantidad de ira o sentimientos atrevidos.

Copa con hojas: Una persona viva.

Copa con frutas: Una persona con metas y deseos por cumplir.

Test del árbol refleja la esencia personal

Si te gustan este tipos de test para los niños, te invitamos a leer el Test de Rosenberg, relacionado con el autoestima de los niños.