Cuando el bebé no quiere biberón es algo normal, es uno de muchos cambios que enfrentará en su vida. Pasar de la lactancia materna a al biberón es una tarea de paciencia, es literalmente una de las primeras situaciones a las que ambos tienen que enfrentarse, ya que se trata de un gran cambio para el bebé.
En los primeros casos, vera que el infante no quiere el biberón en absoluto y crea mucho estrés para ambos, lo que puede llevar incluso a que el bebé interrumpa la alimentación.
Cualquiera que sea la razón para darle un biberón a nuestro hijo, a veces nos encontramos con un problema que no esperábamos: el rechazo.
Es difícil para cualquier bebé dejar de amamantar y comenzar con el biberón. El hecho de que la leche sepa diferente o que la tetina tenga una consistencia diferente a la del seno materno, son las principales razones por las que el bebé rechace este nuevo sistema de alimentación.
Cuando no quiere biberón, este tipo de situación es muy común y muchas madres se preocupan y no saben qué hacer. Piense en aplicar algunas recomendaciones que le ayudarán no sólo a calmarse y ser paciente, sino también a ayudar a sus hijos a adaptarse rápidamente al cambio.
No quiere biberón, sugerencias para una fácil adaptación.
Índice
Elija un biberón que imite la lactancia materna
Existen varias marcas de mamila para los bebés que no quieren biberón, las cuales podemos elegir la que mejor se adapte a nosotros y a nuestro hijo. Las ventajas es que hay tetinas que intentan simular el pecho de la madre, sólo para facilitar la lactancia mixta o la transición del pecho al biberón.
Aliméntalo como si lo estuvieras amamantando
Si bien una de las ventajas de la alimentación con biberón es que prácticamente cualquier persona puede alimentarlo y es una gran oportunidad para que el padre alimente al bebé, a veces puede producirse un rechazo cuando se siente la diferencia entre la persona y la forma en que se lo da a la madre.
Cuando no quiere biberón, deja que otra persona se lo de
Esto es lo contrario del punto anterior, ya que cada niño es diferente, no funcionará de la misma manera para todos. Permita que otra persona lo alimente con el biberón, de esta forma se evita que el bebé extrañe el seno de la madre y trate de aceptar el biberón.
En esta situación es mejor si lo alimenta el padre o algún otro familiar que conviva con el infante. Si es posible evite estar cerca o en casa para que su hijo no pueda olerla y rechace el biberón.
Más consejos para adaptarse cuando no quiere biberón
- Pruebe otras posiciones
- Frotale los labios o tócale la mejilla.
- Si está usando un chupete, busque una tetina del mismo material.
- Calienta un poco la teta.
- Sea paciente. Tal vez su bebé no tiene hambre o no está de humor. Si no tiene éxito en este momento, no se desespere y vuelva a intentarlo después de unos minutos.
Este tipo de consejo siempre tiende a probarse a largo plazo. Si el niño siente que su única opción es el biberón, se adaptará. Entonces la próxima misión será dejar el biberón cuando sea más grande.