Muchos de los abortos espontáneos que se producen antes de las 12 semanas de gestación tienen su origen en un huevo huero o anembrionado.
Una definición más sencilla sería que como un embarazo que nunca fue. Es un tipo de aborto natural que ocurre cuando un óvulo fertilizado no se convierte en un embrión.
En este tipo de patología el embrión frena su desarrollo en una etapa muy precoz y ni siquiera llega a desarrollarse.
¿Qué es un huevo huero?
En el momento en el que un espermatozoide fecunda un óvulo y se implanta en la cavidad uterina de la mujer, comienza la concepción del bebé.
Se inicia así un proceso de división celular que da lugar al embrión, que se desarrollará hasta formarse el feto.
Pero no en todos los casos este proceso se da con normalidad, ya que algunas ocasiones se interrumpe antes de tiempo y el embrión no llega a formarse o detiene su crecimiento. Esto se produce en una fase temprana, donde el feto puede medir menos de un milímetro.
En estos casos, se forma el saco gestacional, pero en su interior no se desarrolla el embrión, de modo que el embarazo nunca podrá llegar a término.
¿Cuáles son las causas?
Es importante saber que es el resultado de una serie de anomalías genéticas o cromosómicas que tienen lugar en el momento de la fecundación. No son factores relacionados con la mujer o el hombre, ni se puede predecir que esto ocurra.
En cuanto a su detección debemos saber que en muchos casos, el huevo huero no es ni siquiera percibido por la mujer. Al ser común que el cuerpo expulse el huevo de forma natural, muchas veces se lo confunde con la menstruación.
Hay otros casos en los que el saco gestacional continua desarrollándose, a pesar de no tener embrión. La gestación sigue su curso como si fuera de un embarazo normal, y hasta la mujer puede obtener un resultado positivo en un test de embarazo casero.
¿Se puede tratar el huevo huero o anembrionado?
El tratamiento no es necesario cuando la mujer expulsa el huevo de forma natural dentro de las primeras semanas de embarazo. Pero cuando la mujer percibe que su menstruación es diferente, más abundante o dolorosa, debe concurrir a un especialista de inmediato para que verifique que se han expulsado todos lo tejidos y el útero quedo limpio.
En los casos en el que no se produce el aborto espontáneo, el experto puede optar por realizar un tratamiento con medicamentos para favorecer la expulsión del huevo huero.
Otra opción es hacer un “raspado” para limpiar los restos, que pudieran quedar, de la gestación embrionaria.