Los hábitos de la higiene diaria para tus hijos son esencial para la salud y es importante que podamos transmitir su importancia. Tanto en el hogar como en la escuela. En muchos casos, una buena higiene previene las enfermedades en los niños y promueve su bienestar y sus relaciones interpersonales.

Tener sus propios productos de higiene personal

Este es el primer paso para acostumbrarse a mantener buenos hábitos de higiene. Desde una edad temprana, los niños deben tener su propio cepillo y pasta de dientes, peine, jabón o toallas y sentirse responsables de ellos.

En caso de comer en la escuela, es necesario que lleven consigo una bolsa con sus cepillos, pasta dental, gel desinfectante y cosas para el aseo personal.

Lávate las manos y las uñas

Las manos son uno de los medios más importantes de transferencia de bacterias, por lo que se debe tener especial cuidado en mantenerlas limpias en todo momento.

Deben aprender a lavarse bien las manos con jabón, especialmente antes y después de comer, después de tocar a los animales, antes y después de ir al baño y, por supuesto, cada vez que estén sucios.

Ducharse o bañarse todos los días

Cuando el momento del baño se vuelva divertido, será fácil establecer una rutina. A medida que crecen, necesitan aprender a lavar cada parte del cuerpo adecuadamente para hacerlos más autónomos.

Cuidar su cabello, uno de los hábitos de la higiene básicos

Hábitos de la higiene diaria cuidado del cabello

No tienes que lavarte el pelo todos los días, pero tienes que mantenerlo limpio. Esto requiere que los niños aprendan a cepillarse el pelo todos los días, y si tienen el pelo largo, cómo cepillarlo.

Cuando sean lo suficientemente mayores para empezar a lavarse el pelo, deben aprender a lavarlo y especialmente a lavarlo correctamente hasta no tener más jabón. Tienes que vigilarlos por un tiempo y asegurarte de que se lavan bien el pelo, pero al final lo hacen ellos mismos.

Lávate los dientes después de cada comida

Hábitos de la higiene diaria para tus hijos

Cepillarse los dientes después de cada comida es un hábito básico que los niños deben aprender desde una edad temprana para prevenir las caries infantil, el mal aliento y las posibles enfermedades.

A partir de los 18 meses de edad, pueden aprender a realizar la rutina de higiene bucal con un cepillo de dientes y a partir de los 3 años de edad, pueden usar pastas dentales especiales para niños.

Se recomienda que no olviden cepillarse los dientes y asegurarse de que lo hacen bien. Es más importante cepillarse los dientes antes de acostarse porque es por la noche cuando se reproducen las bacterias más activas. Los dentistas recomiendan que este proceso dure unos 10 minutos. Estos son los pasos para lavarse los dientes correctamente:

  • Mueve el cepillo de dientes hacia adelante y hacia atrás en movimientos cortos, moviéndolo bien a lo largo de la línea de las encías.
  • Con el mismo movimiento, limpia el exterior, el interior y la superficie de masticación de tus dientes.
  • Limpia la lengua, el interior de las mejillas y el paladar.
  • Cepíllese detrás de los dientes con suaves movimientos circulares.
  • Usa el hilo dental para limpiar el espacio entre los dientes.

Sonarse la nariz

Los resfriados, las alergias y la gripe producen mucosidad, y demasiada puede obstruir las vías respiratorias y dificultar la respiración. Para eliminar la mucosidad, enseñe a los niños a resoplar, use siempre toallitas limpias y no se toque la nariz con las manos sucias.