La tarea de dar de comer a niños requiere de estrategias que los padres deben conocer. No siempre los más pequeños gustan de todo lo que queremos que coman, para su buena salud.
La hora de la comida puede ser un verdadero dolor de cabeza si no tenemos paciencia y dedicación. Muchos pequeños quieren solo alimentos blancos, otros comen solo dulces y a otros les da por lo salado.
Es raro que el niño pida verduras o frutas si no le creamos el hábito de una dieta sana desde pequeños, pero todo puede lograrse.
Algunas estrategias para dar de comer a niños
No hay una estrategia infalible, dependerá del contexto y educación de cada niño, pero podemos utilizar técnicas que nos ayudarán a que se alimenten mejor.
Tiempo para las comidas: no debe prolongarse el tiempo de comer más de la cuenta. Lo ideal es entre 20 y 40 minutos máximo. Esto ayudará a que el niño pueda digerir bien los alimentos y que no coma apurado ni muy lento. Si le cae mal la comida puede relacionar el momento de comer con algo negativo.
Los padres no deben ceder: a la hora de comer los padres deben hacer valer su autoridad y no ceder antes los berrinches de sus hijos, porque una batalla perdida significará que los niños decidan que comer. Además si ceden la alimentación se reducirá solo a dos o tres alimentos de su preferencia y no a una dieta equilibrada.
No comer y mirar televisión: el niño no debe distraerse a la hora de comer y fijar su foco de atención en ese momento. También puede disfrutar, como un adulto, de los olores y sabores de los alimentos sin necesidad de distraerse.
No castigar ni gritar: si lo obligamos y presionamos a que coma con gritos y castigos el niño asociará los alimentos con un mal momento. Los padres deben imponer su autoridad de manera tranquila y haciendo que el niño comprenda por qué es bueno alimentarse.
Estrategias para que se sientan valorados
Alimentos prohibidos: algunos alimentos pueden no gustarle al niño, luego de haberlos probado, y podemos respetarle esta decisión. Por suerte las vitaminas y minerales que el cuerpo necesita se pueden hallar en decenas de alimentos y que no coma alguno no le hará mal.
Platos en cantidades pequeñas y adaptados: muchas veces los padres suelen dar de comer a niños las misma cantidades de comida que a un adulto y eso no está bien. De acuerdo a la edad del niño podemos darle más o menos comida y lo importante es presentarle un plato variado y atractivo, bien servido y que den ganas de comerlo.
Dejarlos elegir el postre: esto motivará a los niños a comer porque saben que luego pueden elegir el postre que más les gusta. Es una buena estrategia siempre que sea variada la elección que hagan.
Como indicamos ninguna estrategia es infalible pero si vamos variando comida, formas y colores de seguro el niño podrá alimentarse bien y crecerá sano.