Desacuerdo entre los padres por la educación de los hijos

La participación de los padres en la educación de sus hijos es muy importante. Esta intervención provoca muchos temores y ansiedades en los adultos. En ocasiones existen desacuerdos entre los padres por la educación de los hijos.

Los padres empiezan a hacerse preguntas que aumentan las expectativas, y esto los lleva a cometer errores «dañinos» en el proceso de aprendizaje. Entre los errores más comunes que los padres enfrentan cuando se trata de criar a sus hijos está el desequilibrio en cómo criar a sus hijos.

Una pareja consiste en dos personas que tienen biografías, personalidades y maneras de ver el mundo de diferentes formas. Parece lógico pensar que cuando se decide iniciar un proyecto de vital importancia, como la formación de una familia y el cuidado del desarrollo y cuidado de los niños. Son lo suficientemente compatibles para hacer viable este proyecto.

El objetivo principal es educar a una persona vulnerable, indefensa y necesitada de materiales de referencia, así como de las cualidades nutricionales y de suavidad que son apropiadas y prevalentes.

Es normal que a causa de las diferencias entre ambos surja algún desacuerdo entre los padres por la educación de los hijos. Como todo, siempre se debe conversar y dialogar, es la mejor forma de comprender a la otra parte sin llegar a discutir.

Sugerencias en caso de desacuerdos en la educación de sus hijos

• No corrija ni hable con maestría sobre cómo tratar con los niños, ya sea delante o detrás de los niños. No hay verdad absoluta, no porque esté escrita en un libro, no porque tu padre o tu madre lo hicieron.
• Evite tomar decisiones sobre la marcha. Aplázalo hasta que entre ambos lleguen a acuerdos, por mínimos que sean. Siempre hay puntos en común, y es prudente centrarse en lo que nos une, no en lo que nos divide.
• Maneje las expectativas y manténgase alejado de la perfección. No existe, especialmente cuando se trata de educación. La idea es hacer todo lo mejor posible, que no será óptimo o ideal, pero será su mejor juego. Compruébalo, no te conformes con poco y trata de hacerlo mejor mañana.
• Todos tenemos limitaciones. Hablando de ellos, sabiendo cuál es tú pareja y como es su personalidad y carácter cuando se trata de educación, sabes cuándo debe intervenir cada uno de ellos.
• Póngase límites a sí mismo, así como nosotros ponemos límites a nuestros hijos. Definir claramente qué acciones son inaceptables para otros y qué límites no se pueden cruzar.
• Confíe en su pareja. Hay muchas maneras diferentes de criar a los hijos y, salvo las que incluyen la violencia física o psicológica, la psicología no describe que un estilo particular de criar a los hijos dé un resultado claro. No creas que solo e tu familia existen desacuerdos entre los padres por la educación de los hijos, en todo el mundo pasa lo mismo y es normal.
• Ayude al niño a entender que mamá y papá están haciendo algo diferente y trate de realzar el lado positivo del otro en lugar de enfatizar el lado oscuro. La prioridad es el niño, no nosotros. Y debemos hacer todo lo posible para asegurarnos de que él o ella crezca con una mejor versión de sus padres, incluso conociendo sus limitaciones.

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