Durante la lactancia la madre debe seguir hábitos alimenticios saludables por su salud y la del bebé. Sin embargo, muchas madres parecen no comprenderlo y tras haber tenido a su bebé tienen actitudes de alimentación durante la lactancia para nada recomendables.
La madre deberá tener presente que todos los alimentos que ingiera repercutirá en la salud de su bebé. Lo importantes no es plantearse una dieta aburrida y que no se pueda cumplir. La madre se irá fijando metas para lograr buenos resultados.
Es importante destacar que el periodo de lactancia es fundamental y donde la mujer requerirá consumir vitaminas y proteínas para estar sana y que también lo esté su hijo.
Índice
La alimentación durante la lactancia
Ya dijimos que la base de todo es que la madre se encuentre bien alimentada para preservar la salud de su bebé y de ella misma. Pero hay que aclarar que esto no significa restringir alimentos o comer otros en demasía.
Dieta con las calorías suficientes
Si la madre se plantea una dieta muy baja en calorías o centralizada en un grupo determinado de alimentos puede que sea un error. Esto podrá disminuir la cantidad y calidad de leche que produzca en detrimento de tu bebé.
Lo recomendable es comer menor cantidad pero de manera más frecuente ya que el cuerpo necesita energías suficientes y trabajar laboriosamente para la producción de la leche materna.
No cuentes las calorías de los alimentos
Se estima que las mujeres que dan pecho necesitan unas 500 calorías diarias más que aquellas que no lo hacen. Es decir, que la mujer que amamanta debe consumir cerca de 2500 calorías diarias.
No se recomienda entonces contar la caloría de cada alimento que se consume sino comer de acuerdo al hambre que la mamá tenga en cada momento.
La cantidad de calorías de cada mujer dependerá de la frecuencia con la que se alimenta al bebé y de las actividades diarias que realiza la mamá. No busques estar delgada en esta etapa, ten en cuenta que lo principal es que estés sana.
Incorporar alimentos saludables a la dieta
Es importante tener una cantidad equilibrada de carbohidratos, proteínas y grasas en las comidas. Esto hará sentir satisfecha a la madre y un niño muy bien alimentado.
Muy importante en la alimentación durante la lactancia es incluir granos, frutas, vegetales frescos y cereales integrales.
La alimentación debe abarcar variedad y se aconseja comer un grupo de vegetales y minerales por días, es decir si hoy no comiste algunos de ellos, pueden hacerlo mañana.
Ingerir grasas saludables aceite de oliva, aceite de canola, pescados como el salmón, semillas, nueces, aceituna y aguacate.
Hay que eliminar las grasas trans y los alimentos como mantequillas, manteca de cerdo, leche entera o las carnes con grasa.
Evita los contaminantes
Sabemos que muchos alimentos pueden contener agroquímicos, los que los hace más grandes y durables, pero no son buenos para nuestra salud.
Por eso se recomienda compartir alimentos, frutas y verduras, de temporada en tu región. Y el consumo de carnes magras, ya que los productos químicos se acumulan en la grasa de los animales.
También el agua del grifo suele contener algunos químicos, por eso te recomendamos beber agua filtrada que es más saludable.
Conclusión
Lo esencial es mantener una dieta equilibrada y lo más sana posible. Es decir, sin consumir alimentos que te resulten sospechosos o con grandes cantidades de grasas. Un nutricionista podrá ayudarte a comer mejor y cuidar tu salud y la de tu bebé.
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