Errores que retrasan el habla de tu hijo

¿Conoces los errores que retrasan el habla de tu hijo? Es conmovedor escuchar sus primeras palabras: Mamá. Papá, agua. Son un hito en su desarrollo y un momento inolvidable para los padres. Pero algunos padres, sin querer, cometen errores que retrasan el habla de tu hijo.

Queremos que aprenda a hablar más rápido y aunque este es un proceso evolutivo que significará tiempos diferentes para cada niño, hay algunos errores comunes que no ayudan al niño a hablar más o mejor.

A continuación se presentan algunos errores que retrasan el habla de tu hijo

• No le dé a su hijo lo que quiere antes de que lo pida, así intentará hablar. Esto es ciertamente lo que queremos decir cuando empiezan a hablar, porque como niños pequeños está claro que pedirán con gestos y que no debemos ignorarlos.

• Es aconsejable evitar las comparaciones con hermanos u otros niños, porque, como ya hemos indicado, cada uno de ellos tiene su propio ritmo, y si no hay transgresiones, también empezarán a hablar. Además, no es agradable para nadie señalar sus defectos y recordar que el niño, aunque no hable todavía, lo entiende todo.

• No se convierta en ventrílocuo o representante de sus hijos. En otras palabras, déjalos hablar. No se anticipe a lo que su hijo quiere decir, porque no le damos tiempo para procesar la información y activar el mecanismo de conversación.
• No use abreviaturas o palabras artificiales para algo que tiene un nombre diferente. Esto no significa que podamos usar nombres abreviados o sensibles para personas, mascotas, muñecas… pero también deberían saber sus nombres correctos.
• El uso de abreviaturas o atajos es normal, especialmente en las primeras etapas del desarrollo del lenguaje, porque los niños no están preparados para pronunciar palabras muy largas o complejas.

• No dejes que siga repitiendo su actuación, porque demasiada demanda puede ser contraproducente. Eso significa que podemos elogiar y apreciar las nuevas palabras que dice, pero no insista en repetirlas muchas veces para cada miembro de la familia o para sí mismo como si fuera un loro.

Supervisar al niño en todo momento

• No deje que su hijo hable solo o se escuche a sí mismo sin nadie que le preste atención. La comunicación debe ser bidireccional, puede ver televisión, o videos en la computadora, pero eso no lo enseñará a hablar. Necesita un adulto o persona mayor que él que le guie en sus palabras y a darle sentido a sus requerimientos.

• No se enfade y no se altere si su hijo ya ha ampliado su vocabulario y empieza a construir las primeras frases diciendo la palabra mal, o cometiendo errores.

Nuestro apoyo es esencial para que puedan seguir explorando este nuevo desafío de hablar, y no debemos hacerles demandas. Con paciencia ayúdalo a armar frases nuevas y así se acostumbrará.

Recuerden que, como cualquier otra habilidad humana, el lenguaje toma tiempo. Cada niño tiene su propio ritmo, y lo que les animará a usar las palabras de la manera correcta es escucharlas y descubrir su mundo. Es necesario acompañar y corregir para que conozca la palabra con la pronunciación correcta.

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