La fábula: La lechera

Con la fábula la lechera y a través de otras fabulas, podemos dar a los niños lecciones valiosas sobre la perseverancia, la inteligencia o el esfuerzo.

Son historias cortas que reflejan las enseñanzas recogidas por la moral. Estos cuentos no sólo sirven para educar a los niños, como en el caso de la fábula la lechera, sino que también son historias divertidas que aumentarán el interés del niño por la lectura o convertirse en una buena técnica para la lectura.

Cada cuento o fábula trae sus propias lecciones. Cada historia se cuenta de la mejor manera para que los niños puedan entenderla y pensar en ella.

Debemos saber que los cuentos, fabulas, historias, serán recuerdos hermosos que quedaran en la mente de los niños. Cada infante lo relatara a su manera, por eso es importante no omitir detalles.

La lechera

La hija del granjero se llevó un recipiente de leche al campo y comenzó a hacer planes para el futuro:

– Si vendo esta leche, compraré trescientos huevos. Con los huevos, sin contar los que no nazcan, conseguiré al menos doscientos pollos.

– Los pollos  estarán listos para venderse cuando sus precios sean más altos, así que para finales de año tendré suficiente dinero para comprar el mejor vestido para la Navidad. Cuando esté en el baile, todos los chicos me buscarán y los apreciaré uno por uno.

Pero en ese momento, tropezó con una roca y cayó al suelo con su jarra de leche, derramando todo al piso. Y todos sus planes terminaron en un abrir y cerrar de ojos.

No habría venta de leche, no habría compra de huevos, ni pollos, ni vestido, ni zapatos.

La moraleja de La fábula: La lechera

No sea ambicioso por un estado mejor y más próspero de donde está.  Usted vivirá una vida inquieta sin poder satisfacer sus necesidades. No anheles demasiado el futuro, porque ni siquiera el presente es seguro.

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