Efectos negativos de los antibióticos en niños

Los antibióticos sirven para tratar infecciones bacterianas en las personas, pero existen algunos efectos negativos de los antibióticos en niños. Esto significa que no son adecuados para el tratamiento de infecciones virales, por lo que no es aconsejable tratarlos usted mismo. Si se toman cuando no son necesarios o cuando son muy necesarios, pueden causar una peligrosa resistencia a los antibióticos y cuando son realmente necesarios, no serán eficaces.

Por lo tanto, no son adecuados para infecciones causadas por virus, la mayoría de los cuales son resfriados, moco, tos, bronquitis y gripe.

Sin embargo, uno de los problemas que más preocupan a las madres y a los padres cuando se trata de la terapia antibiótica, son los efectos negativos de los antibióticos en niños.

Los efectos  negativos de los antibióticos en niños

Trastorno estomacal

La mayoría de los antibióticos en niños generalmente causan trastornos estomacales y otros efectos secundarios gastrointestinales. Estos efectos pueden variar desde náuseas hasta vómitos y diarrea.

Algunos antibióticos, como la penicilina que es muy común para los niños, pueden causar más problemas estomacales que otros antibióticos.

¿Qué podemos hacer? Pregúntele al pediatra si su hijo debe usar antibióticos con los alimentos. Los efectos secundarios de amoxicilina y doxiciclina pueden reducirse si se consumen con alimentos.

Fiebre

Aunque parezca mentira, la fiebre es un efecto secundario común de muchos antibióticos en niños. Y esto puede suceder debido tanto a los efectos secundarios negativos como a las reacciones alérgicas. En cualquier caso, es más común con los siguientes antibióticos: minociclina, sulfonamidas, beta-lactaminas y cefalexina.

¿Qué debo hacer? Si a su hijo le da fiebre mientras está tomando un antibiótico, existe una buena probabilidad de que la fiebre desaparezca. Sin embargo, si la fiebre no desaparece después de 24-48 horas, debe preguntarle a su médico si debe usar analgésicos para aliviar la fiebre.

Foto sensibilidad

La fotosensibilidad es la sensibilidad al sol y la luz ultravioleta. El uso de antibióticos en niños, como la tetraciclina, puede hacer que el cuerpo sea más sensible a la luz. Haciendo que la piel sea más sensible a las quemaduras solares y más perturbadoras para los ojos.

En cualquier caso, como con todos los demás efectos secundarios, la sensibilidad a la luz suele desaparecer cuando el niño ha terminado de tomar un antibiótico.

¿Qué debo hacer? Durante el tratamiento con antibióticos, un niño enfermo generalmente tiene que descansar en casa hasta que se haya recuperado. Si este no es el caso y si su hijo se siente mejor pero necesita continuar el tratamiento, usted debe tomar algunas precauciones cuando su hijo salga al exterior.

Sarpullido del pañal

La rozadura de pañal es a menudo un efecto secundario común que puede ocurrir durante el tratamiento antibiótico de un bebé o niño. Esta infección puede causar enrojecimiento, descamación y daño a la piel de su bebé.

¿Qué debo hacer? Si tiene un sarpullido en el pañal de su bebé, es mejor cambiarlo más a menudo y reemplazarlo por uno nuevo cuando esté mojado o sucio.

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