Balanceo pélvico para embarazadas

Durante la gestación, la pelvis sufre algunos cambios para preparar el útero y bebé, mejorando así el proceso de desarrollo. Esto se da debido a una serie de estimulaciones, dadas principalmente por las hormonas. Pero como se puede ayudar a esto. Balanceo pélvico, una técnica que mejora la gestación.

Este proceso que sucede de forma natural, puede ser ayudado por la propia embarazada y además mejora su condición física. Conoce esto y más en el siguiente apartado.

Suelo pélvico ¿Por qué se debilita?

Corresponde a un sistema de músculos y ligamentos que cierran el suelo del abdomen mantenido así en suspensión el útero, la vejiga y el recto. Pero durante el embarazo y luego de este la musculatura suele debilitarse. A esto se le asocian muchos factores, entre ellos:

• El aumento de peso y presión intraabdominal elevada.
• La hiperlaxitud de los tejidos asociada cambios hormonales
• Distensión de los mismos como fruto del paso del bebé durante el parto.

¿Qué ejercicios realizar para un buen balanceo pélvico?

Puede conseguirse naturalmente al caminar, el cual es un ejercicio muy recomendable en el embarazo aportando muchos y variados beneficios. Algunos de ellos son flexibilizar la pelvis, para mantenernos en forma para que al finalizar la gestación, se ablande el cuello del uterino.

Uno de los ejercicios que se pueden ejecutar en el primer trimestre consiste en que, tumbadas en el suelo  y las piernas flexionadas, brazos sobre el suelo, presionemos la región lumbar contra la superficie. Luego al inhalar aire, relajamos la columna, se repite el ejercicio varias veces.

Es necesario tomar en cuenta que si el volumen de la barriga aumenta ya no podemos hacer este movimiento cómodamente. Pero puedes ejecutar otro tipo de ejercicios como te mostramos a continuación.

Por el contrario en la segunda mitad y sobre todo durante el tercer trimestre los ejercicios de balanceo pélvico deben hacerse de pie, con la espalda apoyada en una pared. Inhalamos al presionar la región lumbar contra la pared y exhalamos al relajar la espalda.

Ya al finalizar el embarazo, puedes colocarte de pie o a gatas, la cual es otra variedad del balanceo. Moviendo la pelvis hacia delante y hacia atrás, mantén la espalda recta.

Beneficios

• Fortalece y estira los músculos de la espalda, la pelvis y los muslos.
• Mejora la postura.
• Previene el dolor de espalda.
• Consigue que las articulaciones de la pelvis sean más flexibles.
• Favorece el flujo sanguíneo de la parte inferior del cuerpo.

Si necesitas otros consejos para realizar ejercicios en el embarazo, revisa otro de nuestros apartados

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