En esta nueva etapa de tu pequeño, es esencial que nosotros los padres estemos atentos a estos trastornos alimentarios que se puedan presentar. Además, es importante también recalcar que sus procesos motrices y sensoriales con su entornos, son importantes para la formación de sus hábitos alimenticios.
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¿Que son trastornos de alimentación de niños?
Los trastornos de alimentación en niños son muy frecuentes. Existe un alto indice de niños con este problema. Si no se atiende a tiempo, puede llevar al deterioro del desarrollo y crecimiento del niño, incluso en el peor de los casos, la desnutrición.
Normalmente, hay niños que se resisten a comer de manera habitual. Esto no solo implica que no quiera comer, el que no quieran comer sentados o quieran tener juguetes alrededor también se encuentra en el mismo trastorno, desviando su atención de la comida. Así, de este modo, se acostumbran a no ingerir suficiente alimento, preocupando a los padres.
Otro problema muy común que se presenta en los niños es la falta de apetito, o alimentarse muy lentamente acompañado de la televisión, música. Incluso, en muchas ocasiones eliminan alimentos de su dieta, por no gustarle el color o textura.
Causas de los trastornos de alimentación
Estos trastornos alimentarios de niños, regularmente vienen acompañados de alteraciones emocionales. Estas últimas son quienes comprometen el normal desarrollo de la alimentación del niño.
Estos factores pueden comenzar desde bebé, con una madre muy nerviosa o con problemas, que haya transmitido esa sensación al niño desde el embarazo o la lactancia. También, pueden ser por factores orgánicos, como intolerancia o alergia alimenticia.
La intolerancia alimenticia proviene por la ingesta de algún alimento que produzca un efecto adverso al organismo, y lleve al niño a un estado de vomito o diarrea, o la alergia alimenticia.
Este tipo de dolencias también pueden coincidir en la pérdida de apetito del niño. Ya que producen malestares muy incómodos como, dolores estomacales o acumulación de gases.
Recomendaciones en el tratamiento.
- Establecer con el niño una comunicación agradable, sin regaños, clara y sencilla.
- Establecer normas, como por ejemplo la hora de la comida es para comer, sin juguetes ni distracciones.
- El momento de la comida debe ser un momento agradable, de relajación, placentero, sin gritos ni regaños.
- Mostrarle dinámicas de texturas y sabores para adaptarlo poco a poco a una dieta.
Nosotros como padres, tenemos muchas responsabilidades con los niños y una de ellas es la alimentación. Por eso, debemos estar atentos a los trastornos de alimentación de niños. Para así poder velar por un sano crecimiento y desarrollo integral del niño trastornos de alimentación