La infertilidad secundaria es una situación que experimentan muchas parejas a la hora de querer concebir un segundo hijo. Es decir que han pasado un tiempo probando distintos métodos y la mujer no ha conseguido quedar embarazada.
Muchas personas no saben de sus existencia y de seguro estarán escuchando por primera vez el término. Lo cierto es que se ha constituido en un problema de nuestros tiempos y por eso trataremos de aclarar en este espacio el por qué se produce y cuáles son sus causas.
Índice
¿Qué es la infertilidad secundaria?
En pocas palabras y de manera clara podemos definirla como a las dificultades que tiene para concebir naturalmente una pareja que ya ha tenido un hijo.
Es decir que la pareja no ha tenido problemas al momento de ser padres en una primera vez, e incluso la mujer ha quedado embarazada rápidamente, pero se les hace muy difícil poder volver a quedar embarazada en una segunda oportunidad.
Cuando la pareja percibe esta situación y concurre a un médico en principio se evaluarán las causas como cualquier tipo de infertilidad. Entre ellas se analizan las hormonas y si existen lesiones en el útero y pasando además por el conteo de esperma, o por una posible enfermedad no detectada.
Luego de ello el médico evaluará la situación actual de la pareja y tendrá que ir descartando algunas causas para tratar de establecer el por qué se produce esta infertilidad secundaria.
¿Cuáles son las causas que producen la infertilidad secundaria?
En realidad no hay una sola causa que la produce sino que se puede hablar de una situación muticausal, es decir que puede haber varias que actúan a la vez.
Son muchas las razones que pueden producir una infertilidad secundaria, pero podemos resumirlas en:
- Edad: las personas que integran la pareja tienen más de 35 años
- Aumento de peso: tanto el hombre como la mujer si han aumentado de peso, de manera considerable, también es un factor importante para que la mujer no pueda quedar embarazada.
- Cambio de hábitos: y también influyen y mucho a la hora del embarazo. Si se han dado cambios bruscos, luego del primer embarazo, en las rutinas, horarios, alimentación y otros, esto puede ser determinante a la hora de que la mujer quede embarazada.
- El estrés: es otra causa muy importante que puede llegar a provocar la mencionada infertilidad secundaria.
- Cambios hormonales: el embarazo puede no llegar por ejemplo por un desequilibro en la hormona tiroides. Por eso el médico lo podría evaluar mediante algunos estudios específicos.
Otras causas médicas
No podemos obviar otras causas de origen médico que pueden provocar que la infertilidad secundaria, a saber:
- Dificultades en la ovulación femenina
- Problemas en la eyaculación del hombre
- Pólipos en el útero de la mujer
- Pareja fumadora
- Lesiones en la zona pélvica
- La ingesta desproporcionada de alcohol de alguno de la pareja
¿Cuáles son los tratamientos para la infertilidad secundaria?
En la actualidad se ha notado una gran evolución en los tratamiento para esta patología, en todo el mundo. Las tasas de embarazado de las parejas que recurren a la llamada reproducción asistida han aumentado.
Es muy importante la evaluación temprana de la infertilidad secundaria ya que las opciones de tratamiento van disminuyendo a medida que pasa el tiempo y la pareja aumenta su edad.
Entre los tratamientos más comunes encontramos:
Medicación
Son indicados para mejorar la fertilidad e incluyen medicamentos orales e inyectables. Con ellos la mujer aumentará el número de óvulos que están disponibles para la fecundación.
Fertilización
Cuando los óvulos capaces de ser fertilizados estén listos, el médicos evaluará cuál será la mejor forma de hacerlo.
Esto puede ser:
- Mediante las relaciones sexuales
- Inseminación intrauterina o invito (en el laboratorio).
Donación de óvulos
Es una opción que debe tenerse en cuenta cuando la mujer es diagnosticada con una reserva ovárica gravemente disminuida sin función ovárica restante.
¿Influye el primer embarazo o parto?
Es muy importante la forma y establecer como se ha desarrollado el primer embarazo o parto de la pareja para determinar si puede ser una de las causas de la infertilidad secundaria.
Por ejemplo si ha habido una lesión uterina o en las trompas de Falopio, una mala cicatrización de la cesárea, pueden influir de manera decisiva para un segundo embarazo.
También un primer embarazo puede ocasionar que determinadas hormonas se alteren y que no vuelvan exactamente a los niveles que tenían antes.
Además un problema de salud en uno de los integrantes de la pareja, que no haya influido en el primer embarazo porque este llegó rápido y de manera natural, puede estar pasando factura tiempo más tarde al querer concebir un nuevo hijo.
¿Cómo vive la pareja la infertilidad secundaria?
Sin dudas no es un trance sencillo para la pareja el hecho de estar buscando un segundo hijo y que este no llegue. Se considera entonces que las situaciones que más aparecen en la pareja son la siguientes:
Tristeza: porque la pareja puede creer que no va a poder ampliar la familia como había planificado
Enfado: es el otro sentimiento que suele aflorar en este tipo de situaciones. En realidad no es un enfado contra el otro integrante de la pareja sino contra la situación que están viviendo.
Incredulidad y negación: por qué la pareja no puede asumir que existe un problema real y se amparan en que ya la mujer una vez ha quedado embarazada y no toman medidas para que esto vuelva a ocurrir.
Ansiedad: que se manifiesta porque el tiempo pasa y el bebé no llega, lo que puede provocar excesiva preocupación en ambos integrantes de la pareja.
Culpa: ambos integrantes o uno de ellos pueden sentir que son culpables de no poder darle un hermano a su primer hijo o de agrandar la familia.
Aislamiento: el problema puede causar que la pareja se aleje de sus amistades ya que podrá sentir que no encaja fácilmente en un grupo, tanto de los que tienen más de un hijo como de los que no tienen hijos, ya que consideran que ninguno de ellos podrá comprender si situación ni ayudarlos.
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