El desarrollo físico de la motricidad gruesa de los niños de 3 a 5 años se caracteriza por una mejora de las habilidades adquiridas en una fase temprana.
Con respecto a las habilidades motoras, el niño comienza a garabatear marcando el comienzo de la escritura. Cada vez es más consciente de sus propios órganos, de sus movimientos y de su coordinación.
A la edad de 3 años, el niño ya ha adquirido muchas habilidades motoras como niño en crecimiento constante.
Puede correr, saltar, escalar, bailar. Sin embargo, los niños todavía desarrollan y mejoran algunas de las habilidades que han adquirido en las fases anteriores. ¿Cómo evoluciona su desarrollo físico de la motricidad gruesa?
Conoce cómo va el desarrollo físico de la motricidad gruesa de los niños
Con el paso de los años, los niños se han hecho más pesados y grandes, pero a un ritmo más lento que antes. Poco a poco se van adquiriendo las proporciones del cuerpo de un joven mayor.
Con su desarrollo mejoran el control sobre sus manos
A nivel cerebral, las áreas corticales del cerebro que maduran más claramente están asociadas con habilidades motoras menores.
Los niños controlan los grupos musculares pequeños por separado. Esto conduce a la posibilidad de choques verticales, redondos u horizontales.
Inicialmente, el desarrollo físico de la motricidad gruesa son estos movimientos que hacen los que serán grandes e indecisos.
Después de unos meses, los niños podrán acortarlos, reducirlos y aclararlos. Al final de esta fase, una vez resueltos todos estos acontecimientos, es el momento ideal para aprender a escribir a pequeña escala.
Al mismo tiempo, se desarrollarán las habilidades motoras gruesas.
Por ejemplo, los niños aprenden a subir escaleras subiendo con ambos pies a un escalón y después al otro, es su ritmo.
La capacidad de controlar grupos musculares pequeños les ayuda a identificar y nombrar las partes del cuerpo con mayor precisión.
Todavía no conocen las partes móviles de su cuerpo, como las manos, las piernas, los dedos y los nombres de los elementos faciales más visibles. Ahora pueden reconocer partes del cuerpo más precisas: codo, barbilla, cadera.
El desarrollo físico de la motricidad gruesa es también el momento de la regulación y la determinación de la lateralidad. Hay niños que a la edad de 3 años parecen ser diestros o zurdos, pero es sólo a la edad de 5 años que el proceso se completa.
Los niños conocen los movimientos de su cuerpo
Todos estos logros en diversas áreas contribuyen a la creación del llamado mapa corporal. Podemos definirlo como una representación que el niño encarna desde su propio cuerpo, desde diferentes partes, desde su propia capacidad de actuar, o desde sus propias limitaciones.
El desarrollo físico de la motricidad gruesa en niños es una representación mental significativa que les ayuda a moverse en el espacio y que los niños o los padres no suelen conocer.
Este patrón se basa en la información visual que recibimos de nuestros propios cuerpos, pero también en la información interna sobre nuestros movimientos.
Aprenden a reconocer una posición en el espacio, equilibrio y experimentos con los cuerpos de los demás, especialmente padre y madre.
El desarrollo de la motricidad es esencial para los niños de entre 3 y 5 años de edad
Esta circunstancia no sólo les permite moverse en todas las dimensiones que ofrece su cuerpo, sino que también les permite conocer el mundo que les rodea y desarrollar la inteligencia. Así que estamos hablando de desarrollo psicomotor, porque son dos caras de la misma moneda.