Para que la adopción sea efectiva y pueda ir el niño a casa, es necesario transcurrir por una serie de trámites obligatorios. Buscando que el proceso sea un éxito, mediante cursos de pre-adopción, evaluación por profesionales y encuentros con el niño asignado. ¿Pero por qué la adopción no funciona?
A pesar de todas estas medidas para que el desarrollo correcto de la adopción se lleve a cabo, en ocasiones esto no ocurre. Es por ello que te informaremos acerca de las razones por las que una adopción no funciona.
La adopción no funciona, ¿Por qué?
- No genera vínculo alguno entre el niño y los padres. En este caso puede ser porque existen problemas de comunicación, entendimiento, o normas. Cuando ocurre esto es necesario hablar con las personas encargadas hacer los seguimientos y traten de encontrar una solución. Ya sea con apoyo de profesionales, especialistas o una nueva familia para el niño.
- El niño no es capaz de comprender que tiene una nueva familia y espera a que aparezcan sus padres biológicos. Esto ocurre a pesar de tener una buena relación con el niño. Es tu tarea hacerle entender de una forma firme y contundente que eso no va a ocurrir. Es importante consultar el caso a un profesional ya que el niño puede crear negación a la realidad y eso crea daño a largo plazo.
Debes distinguir dichos casos de aquellos en los que el niño reta, pone a prueba, o tensa la cuerda. Estos comportamientos, aunque es desesperante como padres además de hirientes, indican que el desarrollando transcurre con normalidad. Ya que se siente cómodo para realizar esas escenas.
Comprender la actitud de un niño adoptado
De vital importancia es importante comprender que un niño adoptado es un niño rechazado, no solo por su familia, sino además por la sociedad. Es por ello que desconfía del mundo que le rodea y por lo que pone a prueba a sus padres. Es fácil que piense: si una vez no me quisieron ¿por qué ahora todo va a ser distinto?. Además, la desconfianza e inseguridad se acompaña de sentimientos de culpa.
Es importante tener en cuenta estas situaciones para comprender lo que le ocurre al niño y tener paciencia y resistencia. Pero esto no debe ser una excusa para hacer lo que quiera. Ser padres significa firmeza, poner límites y educar pero con cariño y comprensión. Para que la convivencia y la confianza entre ambas partes mejore.