Investigación en los Estados Unidos determinó que las bacterias en la placenta provocan partos prematuros. También otros trastornos de desarrollo en el bebé durante el embarazo.
Investigadores de la Facultad de medicina de Harvard y del Hospital Brigham de Mujeres y Niños de Boston afirman que las bacterias que pueden estar presentes en la vagina. Estas bacterias pueden causar inflamación fetal. Esta situación conduce a un parto prematuro.
Tratar estas infecciones con medicamentos durante el inicio del embarazo puede prevenir el nacimiento prematuro. Al igual que otras enfermedades en el recién nacido.
Una reacción inflamatoria en el feto parece causar un nacimiento prematuro. Puede causar lesiones y complicaciones en el feto, lo que conduce a problemas de salud en estos niños a lo largo de sus vidas.
Índice
Muerte y lesiones por bacterias en la placenta
En muchos países en desarrollo, el nacimiento prematuro es una de las principales causas de mortalidad neonatal y de graves complicaciones y problemas de desarrollo, incluidos daños cerebrales, orgánicos y tisulares.
Aunque la causa del nacimiento prematuro no se conoce con precisión y muchos factores parecen estar involucrados, los investigadores creen que una reacción inflamatoria en el feto, causada por una infección, podría ser la responsable.
Estudios previos han demostrado que la mitad de la placenta de los bebés que nacen antes del segundo trimestre y el 41% de los bebés nacen con una bacteria infectada por una cesárea.
Para comprender cómo se produce la inflamación, los investigadores analizaron muestras de sangre de 527 bebés prematuros nacidos por cesárea y examinaron las bacterias de su placenta.
Encontraron que la mayoría de las placentas de los bebés cuyas muestras de sangre mostraron altos niveles de proteína que causaron inflamación contienen bacterias que causan infección vaginal extensa, vaginosis bacteriana.
Vaginosis bacteriana provoca partos prematuros
Para determinar las causas de la inflamación, los investigadores analizaron las muestras de sangre de 527 bebés. Bebés prematuros nacidos después de una cesárea y examinaron las bacterias de su placenta.
Observando que la mayoría de las placentas en las que las muestras de sangre mostraron altos niveles de proteína que causan inflamación contienen bacterias que causan una infección vaginal común.
Encontraron que las muestras de sangre que contenían los niveles más bajos de esta proteína eran muestras de bebés cuya placenta fue alimentada con otro tipo de bacteria llamada lactobacilos.
Los expertos recomiendan atacar la colonización de esta bacteria en la placenta con fármacos específicos o probiótico. Esto puede ser una estrategia prometedora para prevenir no sólo el nacimiento prematuro. Sino también los efectos inflamatorios destructivos y de gran alcance de los nacimientos prematuros.
Nacimientos bacterianos sospechosos
Las mujeres que tuvieron parto prematuro, se midieron altas concentraciones de dos tipos de bacterias. Dichas bacterias eran Mycoplasma y Ureaplasma. Las mismas son descritas como patógenos intrauterinos oportunistas y relacionadas en gran medida con el nacimiento prematuro.
La tercera bacteria, Capnocytophaga coloniza regularmente microorganismos de la cavidad oral y raramente del tracto reproductivo, parece estar igualmente asociada con los abortos espontáneos prematuros.