Amniocentesis: un estudio fundamental para embarazadas

La etapa del embarazo es una de las más felices para los padres y deben hacerse muchas pruebas. Entre ellas se encuentra la amniocentesis, que es en una prueba médica de diagnóstico prenatal que deben realizarse todas las embarazas, entre las semanas 13 y 17 de embarazo.

Así se realiza el estudio médico 

Antes que nada es necesario aclarar que al realizar una amniocentesis estamos haciendo un estudio invasivo.

Consiste en la extracción de una pequeña cantidad de líquido amniótico, que varía entre 14 y 20 c.c. Esta punción debe hacerse en estrictas condiciones de asepsia quirúrgica

En este líquido se podrán estudiar las células que lo componen para obtener información acerca de como se desarrolla el embarazo.

Al comenzar el estudio es fundamental que se haga una ecografía para medir al bebé y comprobar la cantidad de líquido amniótico existente. Esto permitirá decidir cuál es el lugar adecuado para hacer la punción.

Luego se debe desinfectar la piel del abdomen de la mujer y de todo el material que se usará para el examen.

Tras estas acciones con la aguja se atraviesa la bolsa amniótica, y el proceso se va monitoreando en la pantalla del ecógrafo. Así se aspira la cantidad de líquido necesario para ser analizado.

Es válido aclarar que generalmente no presenta complicaciones para la salud de la embarazada. Luego de realizarse una amniocentesis la mujer no necesitará quedar internada y podrá retirarse a su domicilio tras algunos minutos. Allí deberá mantener reposo entre 2 y 3 días para evitar sangrados, pérdida de líquido o contracciones uterinas.

¿Qué patologías pueden detectarse?

Los problemas más comunes que puede detectar este estudio, en el bebé, son:

• Infecciones fetales.
• El síndrome de Down.
• Si existen señales de infecciones bacterianas o víricas (que podrían producir un parto prematuro).
• Sustancias, como la alfafetoproteína que se eleva en caso de espina bífida, que indiquen que el bebé está enfermo.
• Si el pulmón del bebé está en buenas condiciones y maduro.
• Enzimas de su metabolismo son normales.
• Algunas alteraciones de la sangre del feto.
• Si el bebé eliminó sustancias propias de enfermedades a través de su orina.

¿La amniocentesis presenta riesgos?

Al tratarse de una prueba invasiva tiene riesgos. Existe riesgo de aborto de entre el 0,5 y el 1% por la propia naturaleza del estudio, que como explicamos más arriba conlleva la punción del abdomen y del útero de la embarazada.

Otras posibles complicaciones pueden ser:

• La rotura de la bolsa.
• Punción del cordón y hemorragia.
• Punción de un órgano vital como corazón o cerebro.
• La sensibilización Rh , en caso de conocerse el grupo sanguíneo de la madre.

Cabe aclarar que antes de la prueba debe conocerse el grupo sanguíneo de la futura madre y que la misma deberá firmar un documento denominado “consentimiento informado” por el cual autoriza a realizarse este tipo de prueba invasiva.

¿Qué sucede si la amniocentesis da positivo?

Si el estudio da resultado positiva significa que existen anomalías en el bebé. Según la legislación de cada país, la madre tendrá la opción de interrumpir el embarazo voluntariamente.

Sin embargo, algunas mujeres toman la difícil decisión de continuar con su embarazo, aunque el bebé presente una anormalidad. Lo aconsejable es informarse sobre la gravedad de la anomalía para procurar una buena calidad de vida desde el momento del nacimiento del bebé.

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